lunes, 5 de marzo de 2012

Soy.


Ese momento en el que ya no quedan lágrimas que derramar, en el que tus manos vacías, rotas y moradas no podrán sostener nada jamás. Ese momento en el que te das cuenta de que no tienes nada por lo que luchar. Ese momento en el que te das cuenta de que lo diste todo por nada, que ofreciste el corazón al viento;  ese momento en el que viste que se fue sin más. Ya no sientes, ya no sigues. Aún de pié en el borde, aún con fuerzas para seguir adelante, decides helarte, hundirte, morir en el interior, recordar cosas que no volverán, registrar páginas borradas en el tiempo. Un ente atrapado en el pasado, en lo que nunca fue, en lo que ya se ha ido. Eras tanto y ahora nada. Soy.
Y, sin embargo, me limito a mirar, a esperar. Aprendí a sonreír cuando todo iba mal, a alzar la cabeza con el corazón en luto. Son las heridas de la batalla, aquellas que nunca van a sanar. Son todas las cosas por las que caí, por las que morí.
Y, sin embargo, soy. Algo. A medio camino. Pero soy.

4 comentarios:

  1. Claro que eres, otro iluso que lo da todo, como tantos. Recuperate pronto, alguien necesitara ese corazon :)
    besos

    ResponderEliminar
  2. Pero eres.
    Me encanta (:

    Sonrisas espolvoreadas!

    ResponderEliminar
  3. Sigue siendo.
    A veces, el unico modo de no perderlo todo es ese.
    Ya sabes, "no estamos solos, nos tenemos a nosotros mismos".

    ResponderEliminar
  4. Ola!! tu blog está genial, me encantaria enlazarlo en mis sitios webs. Por mi parte te pediría un enlace hacia mis web y asi beneficiar ambos con mas visitas.

    me respondes a munekitacate@gmail.com

    besosss

    Emilia

    ResponderEliminar